A primeros de mes advertimos que en el paraje que se encuentra entre la Cañada Real de Pruna y la Cañada Real de Paradas, al pié de la Vereda del Bajorar habían realizado unos vertidos de latas y botellas, al margen de los que ya existían con anterioridad. Vidrios, plásticos, escombros, alambres, neumáticos, bolsas...
Se trata de una de las pocas manchas verdes que uno puede encontrar por 'las arenas' y por lo que se ve, preferida por los malhechores para arrojar impunemente todo lo que les sobra.
Por ella transcurre un carrilito que solemos tomar en nuestras rutas dada su estrechez y alguna dificultad técnica.
Ante tal tropelía repetida en tantos lugares de nuestros campos el Club decide actuar dando conocimiento a Medio-Ambiente y procediendo también a la recogida de la gran mayoría de la basura del lugar.
Además, decidimos que lo mejor era llevar a nuestros peques a fin de que pudieran aprender esta auténtica lección de respeto por la conservación de la Naturaleza.
Como punto final de nuestra actuación nos dispusimos a plantar varios árboles autóctonos que nos fueron facilitados por gentileza del IES Isidro de Arcenegui.
Por último cargar las basuras en una furgoneta y llevarlas al punto limpio. Lástima que no pudimos recoger los escombros pero es que nuestros recursos son limitados y no disponemos de mayores medios para la retirada y transporte del mismo. Si las autoridades lo estiman oportuno...
Alguien dijo algo así como que era más honroso hacer algo por una persona que pretender la salvación de las masas. A este respecto, este ha sido nuestro granito de arena en pro de la conservación de nuestro entorno natural que si bien no supone resolver todos los problemas medioambientales que nos aquejan, si que es un paso más en el camino correcto.
